Fuerte polémica hay montada con el asunto del Mercadillo del Agricultor que se ha instalado en la Plaza de San Juan. Por un lado están los cuatro agricultores que llevan cestas de productos a los nuevos concejales para que tranquilamente en su casa los degusten y aprecien en su justa medida, y que habían solicitado en campaña al futuro alcalde que los sacara del Centro de Ocio de El Pino porque no les iba muy bien. Y como es lógico éste accedió nada más llegar al poder, me refiero al Trepa como no.
El concejal de Agricultura y Comercio se vota en plancha con este tema sin tener en cuenta los daños colaterales, sin haberse leído las Ordenanzas municipales que prohiben la venta ambulante fuera del Centro del el Pino y sin siquiera licencia de instalación. Los agricultores, los cuatro del patíbulo, los cuatro de siempre, cuentan que están haciendo en un día más de lo que han ganado en los años que llevan en El Pino, y es que yo en El Pino nunca vi castillos hinchables, ni mariachi, ni karaoke...
Los comerciantes de la calle la botella por otro lado han puesto el grito en el cielo y han acudido a instancias supramuniciales para que pongan orden en este asunto tan feo, como al parecer ilegal. Este es el primer fogonazo al grupo de gobierno en su mandato, un grupo que ha quedado en evidencia por la falta de diálogo y de conocimientos para representar concejalias que no saben ni de qué van.
Ellos con decir que lo hacen todo por el interés general y que ha sido sin querer ya se convecen de que esto se arregla sólo y por lo que me han comentado los comerciantes esto continuará como en los culebrones.
Quienes están en estas épocas de crisis pagando impuestos tras impuestos se sienten discriminados por el gobierno municipal que apoya descaradamente a cuatro amigos que pagando dos euros por día se instalan en el mejor centro comercial del pueblo, mientras roban los clientes a aquellos otros gravados en sobremanera por hacienda y por la Seguridad Social.
En este asunto , difícil de reconducir porque es duro dar marcha atrás..,el nuevo grupo de los siete que todo lo cotorrean antes de tomar una decisión ha perdido el control y sólo han logrado que los comerciantes estén n unidos como una piña.
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